Hace ya varios meses que una amiga me dijo que quería emprender, ser su propia jefa, y que había pensado en montar una tienda de ropa. Al principio no supe qué decirle porque por mucha ilusión que tuviera, si me pongo a pensar en tiendas de ropa, lo primero que hago es ver imágenes de centros comerciales repletos de franquicias y tiendas de Inditex, sin embargo, cuando me explicó el proyecto, entendí qué era exactamente lo que quería hacer. De un tiempo a esta parte, si quieres comprar ropa económica tienes sólo un par de opciones: el Primark o los Chinos, y todos sabemos lo que eso conlleva, así que mi amiga vio ahí un camino de negocio: una tienda de moda económica de barrio con ropa de calidad. Es fácil pensarlo pero difícil conseguirlo.
Sigue leyendo