¿Os gusta el vino? A mí antes no me gustaba nada, cero, pero me pasó como con la cerveza, que empecé a probarlo y animarme (sobre todo por lo “cool” que queda llevar una copa de vino en la mano) y acabó por gustarme. Ahora, que solo opto por los vinos blancos, espumosos y rosados, con los tintos no puedo. Yo sé que dicen que son exquisitos, que hay algunos que parecen ambrosía de los dioses, y no lo dudo… Bueno sí, sí lo dudo, porque para mí están asquerosos. Lo que no dudo es que haya paladares que sepan apreciarlos. Dejémoslo ahí.
Es que me hace mucha gracia eso que dicen por ahí de “yo no lo entiendo” o “a mí no me gusta”, y añaden, “pero seguro que es genial” o “pero seguro que está buenísimo”. A ver, puedes decir que no lo entiendes pero que no dudas de la calidad de algo, o de los beneficios que pueda aportarle a alguien, así como puedes decir que algo no te gusta pero entiendes que a otras personas sí porque “para gustos los colores”, pero no puedes decir que algo no te gusta pero seguro que está exquisito, es contradictorio.
Pues bien, yo empecé con los vinos blancos espumosos, tipo Marina Alta de Bocopa, pero ahora casi que me gustan más los vinos blancos no espumosos, esos con los que puedes acompañar a un buen aperitivo. Aunque debo añadir que sigo prefiriendo la cerveza, en la mayoría de los casos, al vino. Ahora bien, el vino me pone “tonta” con mucha mayor facilidad.
El caso es que este próximo sábado unos amigos me han invitado a cenar en su casa, amigos que además traen a su hija pequeña, de tres años, a la escuela infantil donde trabajo y, casualmente, la han puesto en mi clase, y sé que son personas a las que les gusta cenar con vino.
En cualquier otra situación no tendría problema, pero cenar con ellos, un par de amigos más que también han sido invitados, y con su hija, implica que yo deba comportarme porque no creo que fuera muy ético que la niña me viera piripi. Y lo digo sabiendo que puede pasar porque ya pasó, hace dos años, cuando la niña en cuestión tenía un año y además de dormida, no se acuerda de nada, pero yo ya acabé cantando con el Singstar de la Play Sation pirateada de mi colega a todo volumen con varias copas de más.
Me han dicho que si te tomas un protector de estómago y un ibuprofeno aminoras los efectos del alcohol, pero yo no sé si esto es un bulo o una realidad. Yo lo que he leído es que mejora los síntomas de la resaca. Que ese es otro tema, hay quien nunca, jamás, tiene resaca, pero yo siempre la tengo ¿por qué mi mala suerte ha de llegar hasta esos términos?
Buscando y buscando el tema del protector de estómago he llegado hasta varios artículos que nos ofrecen remedios caseros para evitar o mejorar la resaca, así que igual esta vez los pruebo.
Evitando la resaca
Para empezar he leído que nunca debemos beber con el estómago vacío. Esto es algo que suelo cumplir, más que nada porque si te tomas una copa lo haces después de cenar, y si me tomo un par de cañas lo hago siempre con alguna tapa en la mano. Ahora bien, hablando ya de qué comer concretamente, he leído que los frutos secos ayudan a evitar la resaca, igual que la sal que como retiene líquido reduce la deshidratación que provoca el alcohol.
También he leído que comer wasabi (eso verde que pica tanto y que ponen en el sushi) es bueno para la resaca, porque estimula la circulación y ayuda a eliminar toxinas. El problema es que con esta salsa eliminas toxinas y te prende fuego el estómago, pero ese es otro tema.
A nivel medicamentos dicen que el Omeprazol, el protector estomacal del que hablaba antes) ayuda, pero no a no emborracharte, sino a no tener resaca. Igual que el RU-21, que no sé qué es pero ayuda a metabolizar el alcohol.
Otro consejo es bebes agua entre copa y copa, para no deshidratarte, lo que pasa es que eso es mucho líquido ¿no?
Después de beber come, pero no comida rápida mala, sino de la buena, y tómate un Alka Sltzer para el estómago, un Espidifen y un multivitaminas. No sé yo si con tanta cosa no vamos a crear una bomba atómica en el estómago pero es lo que he leído, lo juro.
También leí que las modelos toman Ukon Power durante las fiestas de la semana de la moda. Se trata de una famosa bebida japonesa que disminuye los efectos del alcohol. Se hace a partir de la cúrcuma, que estimula la producción de bilis y por lo tanto ayuda a reducir el nivel de alcohol en sangre. Se vende en Amazon
No sé, tal vez lo pruebe todo este fin de semana y os pueda contar el lunes si he sobrevivido… ¿alguien ya ha probado estas cosas? Si tenéis alguna recomendación, hacédmela por favor…